Hacer un parón medianamente largo en tu entrenamiento bien sea circunstancial o por lesión suele ir acompañado de una bajada de forma. A veces llegar a aceptar esto y saber dónde estás cuando retomas los entrenamientos se hace un poco difícil. Entonces uno intenta entrenar a ritmos más rápidos para los que está preparado en ese momento. ¿Qué consecuencias tiene esto? ¿Viene bien para forzar a recuperar antes la forma o puede tener un efecto contrario?
Quizá te has visto en una situación así si has tenido que parar unos meses de entrenar, sobre todo si no ha sido por lesión. Tienes la sensación de que podrás retomar los entrenamientos y en una o dos semanas recuperarás bastante los ritmos y las buenas sensaciones. Así que, pronto te marcas los ritmos de las series que estabas haciendo antes del parón pero te encuentras con que no puedes con ellos. Igual las primeras series aguantas más o menos pero no consigues completar el entrenamiento.
Tu idea es que no has podido perder tanta forma y sigues forzándote a llegar a esos ritmos. Quizá llegas a suavizarlos un poco pero siguen suponiendo un alto esfuerzo. En realidad estás entrenando a un ritmo que no es el que te corresponde en ese momento. Leer más